En 2021 estaban registradas 5,7 millones de empresas en Colombia, según el DANE. El 99,9% eran PYMES (Pequeñas y Medianas Empresas). Algunas de las personas responsables de manejar estas firmas con seguridad que han oído e intentarán aprovechar la nueva tendencia de la “transición energética”. Pero realmente ¿Qué tipos de negocios podrían configurar las PYMES de manera sostenible?

Varias de las oportunidades de negocios de la “transición energética” están relacionados con las energías renovables, con la eficiencia energética y con la digitalización de los servicios energéticos. Por otro lado, algunas de las amenazas de estos negocios tienen que ver con ciertas características que mencionaremos a continuación.

Hace 15 años fundamos una empresa de consultoría energética con una duración mínima de 100 años. Algunos amigos, nos decían que esto no tenía sentido, ya que es poco probable que un ser humano alcance esa edad. Pero la razón principal para tomar esa decisión es que, la mayoría de los proyectos de energías renovables tienen un horizonte de vida útil de 25 a 30 años. Creo que próximamente la duración de estos proyectos pasará a ser de 40 a 50 años. No tiene mucho sentido y no ofrece confianza que una empresa creada para que dure solo 5 años promueva, construya y responda por un proyecto que tendrá una vida útil de 30 años. Por ello, un aspecto que deben interiorizar las PYMES en el ambiente de la “transición energética” es que estos son negocios de muy largo plazo.

Los equipos de conversión de energía fotovoltaica o eólica no pueden funcionar de manera autónoma, entre otras cosas porque aún no tenemos la habilidad de controlar la luz directa del sol, ni la fuerza de los vientos. En la ecuación de un proyecto de energía renovable siempre se debe tener en cuenta la disponibilidad de la otra fuente de energía primaria base o principal, que debe trabajar en paralelo. Cuando esto no ocurre el proyecto fracasa. El proyecto no fracasa a los pocos días de la inauguración. Casi siempre falla a los dos o cuatro años; cuando dejan de funcionar las baterías que tienen una duración de pocos años. Algunos proyectos fotovoltaicos no cumplen con las expectativas; y no es por falta de luz solar o por problemas técnicos en su construcción. La razón principal para estos resultados decepcionantes se centra en la fuente de la energía primaria base. Cuando el proyecto se conecta a la red interconectada nacional en Colombia, la fuente de energía base principal es la energía hidráulica de nuestras represas. Si el proyecto no se puede conectar a esta red, la transición energética queda en “cuidados intensivos”.

La otra manera de conectar un proyecto fotovoltaico o eólico es a una zona que no esté interconectada con la red nacional. En realidad, esta es un área más decepcionante que la anterior. Entre otras cosas porque las expectativas han sido mucho más altas. Y son más altas porque en estas regiones alejadas, el suministro de la energía eléctrica podría llegar a ser uno de los factores más importante de desarrollo y de bienestar social.

Las zonas interconectadas ya cuentan con disponibilidad de energía eléctrica y con uno de los menores factores de emisiones de carbono del mundo. La red eléctrica interconectada de Colombia tiene un factor de emisiones cercano a 0,33 kilos de CO2 equivalentes por cada kWh consumido. Este valor para China es 0,85 y para India es 0,90. Los valores para otros países son, Argentina: 0,50; Chile: 0,59; Ecuador: 0,57; México: 0,53; Panamá: 0,58 y Perú: 0,58. Hay dos países de Latinoamérica que tienen un menor factor de emisiones que Colombia, Brasil: 0,29 y Costa Rica: 0,28.

Por el contrario, las zonas no interconectadas no tienen opción para el suministro confiable de energía, a precios asequibles y con bajas emisiones. Este es un problema no solamente de Colombia, sino de todas las localidades alejadas del mundo. Lo sorprendente de esta situación es que siempre se ha contado con amplia disponibilidad de recursos para invertir en la construcción de los proyectos de energías renovables, casi siempre a costo cero para las localidades. Hay muchos fondos gubernamentales y de organizaciones no gubernamentales disponibles para invertir en estos proyectos.

Los que no están disponibles son los recursos requeridos para suministrarle a las localidades la energía primaria base que se requiere para que trabaje en paralelo con la energía renovable, de manera: a) sostenible, b) confiable, c) con costos favorables y d) con bajas emisiones. Debido a la lejanía de estas localidades, la energía primaría base seleccionada debe cumplir con un requisito adicional: debe tener una alta densidad energética. Es decir, el contenido energético por galón, por metro cúbico o por kilo, debe ser lo más alto posible, de manera que su transporte terrestre, fluvial, marítimo o aéreo no resulte muy costoso, por unidad de energía. En cualquier caso, el transporte del energético es un componente importante del costo de la generación de energía eléctrica. En muchos casos el valor del transporte resulta más alto que el propio combustible. Candidatos para ser la fuente de energía primaria base en esta situación son: el diésel, el fueloil, el GLP, el gas natural comprimido, el gas natural licuado, el hidrógeno, el alcohol carburante, y se escuchan más opciones.

Una vez se define cuál es la fuente primaria base del proyecto de energía renovable, se estructura el modelo de negocio para suministrar y cobrar por el servicio de energía eléctrica en una localidad. La energía eléctrica debe crear beneficios en la comunidad de manera que esta progrese y le queden excedentes para poder pagar por el servicio de suministro de energía eléctrica de manera sostenible, principalmente para pagar el energético de la fuente primaria base. Esto significa que, para que un proyecto de energía renovable sea sostenible, el sistema de energía renovable debe estar inmerso dentro de un proyecto integral de desarrollo económico de dicha región. Lo cual es lo más responsable, aunque mucho más complejo de lograr.

Desde luego, que hay otros componentes en el costo del servicio de energía en zonas no interconectadas: las redes eléctricas, los equipos de medición, el mantenimiento del sistema, las pérdidas, la administración, entre otros. Pero si no se supera el tema del costo de la fuente primaria base y no se facilitan opciones para que la comunidad cree nuevas fuentes de ingresos duraderas a partir de la disponibilidad de la energía eléctrica, el sistema no será sostenible.

¿Podrán las PYMES crear oportunidades innovadoras de negocios sostenibles, para satisfacer las necesidades del nicho de las zonas no interconectadas, con una visión de largo plazo? Estoy convencido que sí. Aunque en estos momentos no tenga la más mínima idea de cómo se logrará esto.

Por otro lado, ¿Podrán las PYMES crear oportunidades innovadoras de negocios sostenibles, para satisfacer las necesidades del nicho de las zonas interconectadas, con una visión de largo plazo? No estoy tan seguro. Esto, debido a que la actual regulación les ofrece a las empresas incumbentes ciertos privilegios que crean barreras de entrada para las PYMES, que son difíciles de superar.

A pesar de ello, vale la pena analizar once oportunidades de negocio genéricas en la “transición energética”. Estas oportunidades fueron identificadas por la “Estrategia de Energía Suiza 2050” (Facchinetti, 2018) y por la “Confederación Suiza”. Creo que podrían servir como una guía inicial de exploración de oportunidades de negocios para las PYMES que deseen aprovechar de manera real la tendencia de la “transición energética”.

Transición energética Objetivos
Eficiencia Energética.
Energía Renovable.

 

 Objetivos Megatendencias Ejes de desarrollo de negocios Oportunidades
Eficiencia Energética. Digitalización. Eficiencia energética. 1. Reducir demanda.
2. Manejar demanda.
3. Optimizar eficiencia.
Mercados eléctricos. 4. Ofrecer flexibilidad.
5. Plantas de generación virtuales/ Almacenamiento.
6. Electrificación.
Descentralización. Redes inteligentes. 7. Evitar expansión de red.
8. Microrredes.
9. Comunidades de energía locales.
Energía Renovable. Descarbonización. Energía renovable. 10. Energía renovable y redes integradas.
11. Energía renovable para autoconsumo.

 

Referencias

Facchinetti, E. (2018). Eleven Business Opportunities emerging from the Energy Transition. En Network Industries Quarterly | (Vol. 20).